A la actriz Gena Rowlands le diagnosticaron Alzheimer, según reveló su hijo, el director de cine Nick Cassavetes.
Se trata de la misma enfermedad que sufría el que sin duda ha sido su personaje más famoso: Allie, la protagonista de la película Diario de una Pasión.
Gena Rowlands, actriz de ‘Diario de una pasión’, tiene Alzheimer
En aquel proyecto trabajó con su hijo Nick, quien dirigió la comedia romántica protagonizada por Ryan Gosling y Rachel McAdams, y decidió que su mamá era la mejor opción para interpretar a la versión anciana de la famosa actriz.
En la actualidad, Gena tiene 94 años, y hace cinco que recibió el diagnóstico que lo cambió todo.
«Conseguí que mi madre interpretara a la Allie mayor, y pasamos mucho tiempo hablando de la enfermedad de Alzheimer porque queríamos que fuera lo más auténtico posible a la hora de llevarlo a la pantalla, y ahora, desde hace cinco años, tiene Alzheimer», reveló.
«Y es una locura: lo vivimos a fondo, ella lo interpretó ante las cámaras y ahora nos ha tocado a nosotros», agregó.
En un principio ella no quería aceptar el papel de Allie porque su propia madre, Lady Rowlands, había luchado contra este trastorno neurodegenerativo que destruye la memoria inmediata y otras capacidades mentales.
Para ella, resultaba muy duro replicar lo que había visto padecer a su madre, pero al final acabó accediendo por complacer a su hijo. Aunque siempre hablaba del rodaje con mucho cariño, también fue una de las experiencias más duras de su larga carrera, que le valió dos nominaciones a los Oscar.
Gena Rowlands tiene un grado de demencia avanzado
Nick explicó que Gena padece un grado de demencia muy avanzado en nueva entrevista al portal Entertainment Weekly, que concedió con motivo del vigésimo aniversario de la película.
Para él fue una experiencia muy curiosa dirigir a su madre, y pedirle además que volviera a rodar una escena donde su personaje recobra brevemente la memoria porque los ejecutivos del estudio querían dotarla de un mayor dramatismo.
«Me dijo: ‘Estás bromeando. ¿Vamos a tener que volver a rodar por un problema con mi actuación?'», aseguróel cineasta, que recuerda aquella conversación con su madre como el único momento de su vida profesional en que sintió que estaba en apuros.
«De pronto, mamá está enojada y yo le había preguntado: ‘¿Puedes hacerlo, mamá?’. Y ella me contestó: ‘Puedo hacer cualquier cosa’. Te prometo, por la vida de mi padre, que esto es verdad: en cuanto empezamos a rodar, le salieron lágrimas de los ojos».