Patricia Ulate, regidora presidenta de la Comisión de Mujer, Familia, Igualdad de Género y Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes presentó dictamen en el que se propone la Semana Municipal contra el Acoso Callejero.

El Ayuntamiento de Chihuahua aprobó reformas al Reglamento del Sistema de Justicia Cívica del Municipio, con el objetivo de establecer mecanismos de reeducación a las personas que incurran en conductas de acoso callejero, además de las sanciones ya previstas por la normatividad vigente.
Con esta modificación al Reglamento, las y los jueces cívicos del municipio tendrán la facultad de ordenar, como parte de las medidas correctivas, la asistencia obligatoria a talleres de sensibilización sobre género, formación en nuevas masculinidades y, en caso necesario, atención psicológica especializada, explicó la regidora Patricia Ulate, iniciadora de la propuesta ante el Cabildo.
Este enfoque, explicó Paty Ulate, responde a la necesidad de ir más allá de las sanciones punitivas. multas, arrestos y trabajo comunitario son necesarios, pero no suficientes. Si queremos erradicar el acoso callejero, debemos transformar las creencias y actitudes que lo perpetúan, añadió Paty Ulate.
Indicó que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana 2024, el 17.1% de las mujeres mayores de 18 años ha sido víctima de esta forma de violencia que vulnera la libertad de tránsito y la seguridad emocional de las personas, especialmente de mujeres, niñas y adolescentes.
El dictamen aprobado también contempla la creación de la Semana Municipal contra el Acoso Callejero, a celebrarse cada año en el marco del 7 de abril, para generar conciencia social, promover la educación comunitaria y construir alianzas con organizaciones civiles y otros sectores clave para combatir esta forma de violencia desde la raíz.
Debemos tener presente que el acoso callejero es una expresión clara de desigualdad y abuso de poder. No se trata de un acto aislado, sino de una manifestación sistemática de violencia que impacta profundamente la vida cotidiana de quienes lo sufren, expresó la regidora proponente durante la sesión de aprobación.
Con estas acciones, dijo, Chihuahua reafirma su compromiso con una Justicia Cívica con enfoque de derechos humanos: una que no solo sancione, sino que transforme. Una que busque romper ciclos de violencia y construir una ciudad más segura, equitativa y respetuosa para todas las personas.