La policía china ha desarticulado una red de tráfico de carne de gato que se dedicaba a sacrificar felinos y vender su carne como si fuera de cerdo o cordero. En la operación se rescataron más de 1.000 gatos,según medios locales.
Los agentes consiguieron interceptar un camión que transportaba felinos en la ciudad oriental de Zhangjiagang gracias a las pistas proporcionadas por los activistas por el bienestar animal. Tras ello, los gatos fueron trasladados a un refugio, según un informe de The Paper.
El rescate de los felinos puso de manifiesto toda una red de comercio ilícito de carne de gato que ha generado fuertes preocupaciones en torno a la seguridad alimentariaen el país asiático. Según investigaciones, la carne de gato se paga a unos unos 4,5 yuanes (unos 50 céntimos de euro) por cada 600 gramos aproximadamente. Su carne iba a ser vendida al sur del país y a servirse en forma de brochetas y salchichas supuestamente «de cerdo y cordero».
La policía todavía no ha esclarecido si se trataba de gatos callejeros o mascotas, pero según The Paper, los activistas en Zhangjiagang habían informado de una gran cantidad de gatos encerrados en cajas de madera escondidas en un cementerio y los monitorearon durante seis días. Cuando subieron a los gatos a un camión el 12 de octubre, detuvieron el vehículo y llamaron a la policía.
Información tomada de El Periódico