El tremebundo guion de Anatomía de una caída, repleto de giros, intriga, y de mostrar las mil caras de nuestras vidas y nuestras relaciones a partir de la sospechosa muerte del marido de la protagonista, se ha alzado con el Oscar al mejor guion original en la ceremonia de los Oscar. La directora Justine Triet, guionista del filme junto a su pareja Arthur Harari, han recogido el premio tras haber ganado ya el Globo de Oro en la misma categoría y optar a otras cuatro estatuillas en los Oscar, incluida la de mejor película.
«Gracias por este premio, me va a ayudar con la crisis de los cuarenta», ha bromeado una emocionadísima Triet (Fécamp, Francia, 1978) en el escenario. También ha recordado cómo contrastando con la noche de glamur que son los Oscar ellos pergeñaron el guion del filme «durante la pandemia con dos niños en casa y sumergidos en pañales». Y ha agradecido al reparto encabezado por la poderosa Sandra Hüller «lo que habéis hecho, habéis elevado el guion y sois lo mejor para una directora y un guionista».
Triet y Harari han confirmado que eran los grandes favoritos venciendo a David Hemingson, candidato por Los que se quedan, la película de Alexander Payne, a Bradley Cooper & Josh Singer por Maestro, la historia de Leonard Bernstein, a Samy Burch y Alex Mechanik por Secretos de un escándalo, de Todd Haynes, y a las Vidas pasadas escritas y dirigidas por Celine Song, el reencuentro de dos amigos de la infancia.
Con información de Vanguardia