Madrid. El presidente francés, Emmanuel Macron, terminó su visita al territorio de ultramar de Mayotte con una polémica declaración: «si no fuera por Francia, estarían 10 mil veces más hundidos en la mierda». Tras examinar de primera mano los devastadores efectos del paso del ciclón ‘Chido’ el pasado fin de semana, sobrevivientes de la tragedia le increparon en público y le recriminaron la marginación de la que llevan décadas siendo objeto.
«Hoy viene a decirnos que todo va bien cuando todo va mal», reclamó un residente al presidente francés durante una visita a la localidad de Pamandzi, en la isla de Petite-Terre, una de las que conforman el archipiélago, entre gritos de «dimisión».
«¿Qué recursos nos vas a dar? ¡Porque hasta ahora mi familia no sabe si estoy vivo o si estoy muerto! Vamos a contar las muertes en las barriadas, señor presidente», añadió en el comienzo de una discusión recogida por la cadena francesa Brut.
El potente fenómeno climático dejó al menos 35 muertos a su paso por este territorio francés, indicaron las autoridades en un nuevo balance presentado este viernes durante la visita de Macron.
El ministerio francés del Interior informó además de 67 heridos graves y 2.432 heridos leves, y advirtió que el balance es «muy difícil de consolidar». Las autoridades temen un número de muertos mucho mayor.
Mayotte cuenta con unos 320 mil habitantes, pero se calcula que viven entre 100 mil y 200 mil más por los migrantes en situación irregular procedentes de la vecina Comores. Casi un tercio de la población reside en viviendas precarias.