El fiscal general del Estado, César Jáuregui Moreno aclaró que los hechos violentos en la región de Ojinaga no tienen relación con la disputa entre grupos del crimen organizado que se registra en diversos municipios de Sinaloa.
Indicó que la principal hipótesis es que los enfrentamientos en Ojinaga, Coyame y Manuel Benavides derivan de una traición al interior del grupo conocido como «La Línea», que también conectarían el enfrentamiento en la carretera Parral-Jiménez y la intención de ingresar a la entidad otro grupo criminal.
Asimismo, recordó que la violencia que se registra en Sinaloa tiene que ver con el conflicto entre la gente que lidera «Mayo Zambada» y quienes sirven a los hijos de Joaquín Guzmán Loera.
No obstante, reiteró que no se permitirá que los ataques entre grupos criminales afecten a los centros de población por lo que ya se reforzó la presencia de elementos por la Agencia Estatal de Investigación (AEI), así como de las fuerzas federales a través de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).