Los ganaderos de México propusieron al gobierno de Claudia Sheinbaum ocho medidas para frenar al “gusano barrenador”, entre ellas, piden cerrar la frontera sur con Guatemala y mayor control del contrabando de ganado contaminado.
Luego de que Estados Unidos anunció frenar por 15 días las exportaciones de ganado mexicano por la detención de la enfermedad del gusano barrenador, los productores pecuarios de todo el país, encabezados por el presidente de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas, Homero García de la Llata, sostuvieron una reunión virtual con el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué a quien le expresaron su preocupación por el freno del envío vacuno.
Homero García pidió al funcionario que se integre la participación de ganaderos de ambos países en el comité binacional México-Estados Unidos conformado por Senasica y el Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal de Estados Unidos (Aphis) para aprovechar la experiencia de los productores pecuarios y su conocimiento del tema en campo.
A través de un comunicado, la CNOG señaló que los ganaderos acordaron la petición a las autoridades del país para “sellar la frontera sur al trasiego de ganado, solicitando a la Secretaría de Seguridad Púbica Federal incrementar su presencia en la frontera sur”.
Demandaron a Sader que se incremente el presupuesto para combatir el avance del gusano Barrenador y la revisión de la llegada del ganado a las engordas con personal de Senasica revisando la llegada de los embarques.
Como parte de las medidas de control demandaron al funcionario federal, la regionalización de la frontera norte y control de la movilización hacia las entidades exportadoras, así como el establecimiento de la planta de producción de mosca en la frontera sur.
Además, plantearon la participación de los gobiernos estatales y comités en el control de la movilización por parte de los gobiernos de los Estados.
Julio Berdegué reconoció el trabajo y compromiso de la Confederación Nacional Ganadera para coordinar esfuerzos con el Estado mexicano para enfrentar este reto sanitario, quienes también urgieron continuar con la capacitación de los productores en la revisión de heridas y tratamiento de las mismas.
