Entre las actividades que forman parte del sector secundario, la construcción registró un crecimiento de 15.6% en el 2023, que fue determinante para el desempeño del Producto Interno Bruto (PIB) en su conjunto, explicaron analistas de BNP Paribas y Santander.
De acuerdo con el Director Ejecutivo de Estudios y Asuntos Públicos en Banco Santander México, Alonso Cervera, “parece ser generalizado el crecimiento de la construcción del sector público y privado”.
Evidenció que visto por regiones, la construcción alcanzó expansiones de 40% mensual en el Norte y Noreste del país, lo que podría estar vinculado al nearshoring.
“Son las empresas nacionales que están incrementando su capacidad de producción. Ahí vemos a los Fibras de bienes raíces que están expandiendo su capacidad instalada para tener parques industriales más grandes y robustos para ofrecer a los extranjeros que esperan seguirán llegando”, añadió Cervera.
Destacó que en el sur del país también se observa un crecimiento de 40% mensual en el sector de la construcción, que está más vinculado al desarrollo de proyectos públicos como el Tren Maya, el Corredor Transístmico y la refinería.
“Deberíamos ver una moderación en este tipo de gasto en obra pública en la medida que se concreten las obras del gobierno. Las tasas de crecimiento ya no serán tan abrumadoras, pero sí anticipamos persistencia en el gasto de construcción del sector privado que seguirá preparándose para la llegada de extranjeros”.
Desde la perspectiva de Cervera, las multinacionales seguirán buscando producir cerca de casa y de sus proveedores para no volver a pasar por la incertidumbre de que sus contenedores no lleguen o que sus productos se queden varados.
“Estamos en un proceso de elevar la capacidad productiva del país. Sería ideal si esta relocalización de empresas ayuda a elevar a 4% anual el crecimiento de la economía, pero en el pasado hemos registrado un crecimiento promedio de 2.5% a 2.3%, así que tenemos buen espacio para incrementar la tasa”.
Rebote e impulso por nearshoring
Aparte, la economista para México en BNP Paribas, Pamela Díaz Loubet, acotó que como fue uno de los sectores que que más se rezagaron en la post pandemia.
Mucho de lo que vemos de crecimiento es un regreso a niveles de antes del Covid. Pero no es la única razón. También está impulsado por el gasto público en infraestructura para los proyectos clave y otro motor es la relocalización de cadenas productivas.
“Más allá de su peso en el PIB, es relevante porque nos está dando pistas de si se está materializando el nearshoring”, subrayó.
Explicó que no hay información suficientemente desagregada como para identificar qué tanto del crecimiento resulta del gasto de gobierno en infraestructura, o en nearshoring. Lo que yo haría sería comparar la tendencia que traía la construcción antes de la pandemia y cómo se está comportando.
En el caso de la Inversión Extranjera Directa es muy claro que está fuera de rango, que no trae una recuperación natural. Al parecer ya está integrando una parte del nearshoring y podría suceder algo similar en la construcción.
Los datos
Tal como lo refirió la experta de BNP Paribas, el PIB de la construcción se desplomó 17.81% anual en el 2020. Un desempeño que hiló entonces dos años consecutivos en picada, pues en el 2019 ya traía una caída de 3.97 por ciento.
La trayectoria se tornó positiva hasta el 2021, cuando se observó un crecimiento anual de 10.33%, y luego dio otro importante brinco de 15.6% en el 2023.
