Por: Nancy De León
Este lunes más que recordar aquel voraz incendio que consumió dos locales en la calle Libertad casi esquina con Tercera, se honra la memoria de Humberto Acosta Saéñez y Jorge Guzmán, bomberos que perdieron la vida al colapsar el techo de un negocio sobre ellos.
En este siniestro, tres bomberos más sufrieron lesiones y el subjefe operativo de la Policía Municipal quedó intoxicado por monóxido de carbono. Es así que a 19 años este trágico suceso que dejó una huella en la memoria de los capitalinos, en punto de las 9:00 horas, como cada año, se rendirán honores en la Calle Libertad donde se encuentra la placa que recuerda a quienes murieron en cumplimiento de su deber.
Viernes 22 de septiembre 2006, 9:32 am, Chihuahua, Chihuahua.
Sonó la alerta al 060, llegó reporte de un incendio en los locales La Michoacana y Cassandra, ambos ubicados sobre la calle Libertad entre Independencia y Tercera en pleno Centro de la ciudad.
Tras el arribo de los bomberos, se percataron que el fuego ya estaba muy prolongado, era un caos, gritos y gente corriendo, mientras que la policía municipal hacía lo suyo, evacuar y regañar a los curiosos.
Los traga humo al ver la magnitud activaron varios comandos tanto por la avenida Juárez, Tercera y Libertad con la intención de cubrir varios puntos.
Comenzaron a pasar las horas, había angustia y ya mucha desesperación. De pronto entre compañeros comenzaron a preguntar por Acosta y Guzmán. Lo anterior tras colapsar una de las lozas.
En efecto, ellos ya no salieron vivos del lugar. Se cumplieron poco más de tres horas para sofocar el fuego. Y es que lo que han contado en estos años los propios compañeros es que, entre más movían escombros, más se prolongaban las llamas.
Humberto Acosta y Jorge Guzmán entregaron su vida en cumplimiento del deber, tres más compañeros con daños por intoxicación y quien fuese en aquel momento subjefe de Bomberos, Luis Ramón Corral Torresday, sufrió daños por el monóxido dejándole secuelas.
Pasan los años y no se supera
Esta tragedia no solo consternó a los habitantes de la ciudad de Chihuahua al ver las noticias y hasta de ser testigos de cómo aquella mañana de fin de semana, una gran nube negra salía desde el corazón de la capital.
La ciudad gobernada por el alcalde Juan Blanco Zaldívar, estuvo de luto, con honores despidieron a los caídos y cada año se honrará su memoria con una placa que fue puesta en la calle Libertad, donde ocurrió aquella desgracia.
Frente a los negocios está la placa; cada año que pasa, cada administración municipal en turno, es quien rinde este homenaje póstumo. Se les rinde una ofrenda floral y se toca la campana, culminando con el himno del bombero.
Este homenaje lo organiza la Dirección de Seguridad Pública Municipal donde se dan cita la familia de los bomberos caídos, así como los elementos de la corporación.
Las imágenes que a continuación se publican son de archivo captadas por noticieros de Televisa y TvAzteca que aquel viernes cubrieron el evento.








