El Comité Directivo Municipal (CDM) del PAN destacó como excelente el trabajo del alcalde Marco Bonilla, por su ejemplo en acciones contra los ‘narcocorridos’, tras ser reconocido como uno de los presidentes municipales con más alta aprobación nacional y al conseguir mejoras en la percepción de seguridad de Chihuahua.
The New York Times, de alcance internacional, citó a Marco Bonilla por las ejemplares acciones del Municipio de Chihuahua por impedir que se siga extendiendo la cultura de la violencia.
“Más y más municipios comienzan a seguir los pasos de Chihuahua capital y replican sus políticas contra la apología al delito y contra la violencia a las mujeres en los espectáculos”, describió Sarahí Franklyn.
El Alcalde expuso que México debe erradicar la cultura de la violencia, tanto del crimen organizado como la cometida contra las mujeres, para conseguir resultados en materia de seguridad, con base en la congruencia que caracteriza a los gobiernos humanistas de Acción Nacional, continuó.
La Asociación Nacional de Alcaldes (ANAC) acaba de reconocer a Marco Bonilla como uno de los alcaldes mejor evaluados por sus ciudadanos, al conseguir una aprobación del 65%, de acuerdo con la encuesta de C&E Research, producto del trabajo y cercanía que le ha caracterizado desde su primera administración y tras ser refrendado por los chihuahuenses.
Como parte de la serie de resultados que ha venido acumulando la administración municipal, en Chihuahua capital volvió a disminuir la percepción de inseguridad, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública (ENSU) del Inegi, publicada a inicios de esta semana.
Ahora más de la mitad de los chihuahuenses consideran segura la capital del estado y de este modo avanza el compromiso para que salga de la lista de 50 ciudades más inseguras.
“Nos da gusto que otros repliquen estas buenas prácticas, significa que Chihuahua capital da norte a México, incluso lo reconocen a nivel internacional. Hasta los gobiernos de otros partidos comienzan a seguirlas, incluso cuando en su momento llegaron a criticarlas como la prohibición de espectáculos que glorifiquen la violencia”, finalizó Sarahí Franklyn.