Los votantes irlandeses han rechazado las propuestas para sustituir las referencias constitucionales a la composición de la familia y a los «deberes de la madre en el hogar», en una importante derrota para el Gobierno.
El primer ministro, Leo Varadkar, había presentado la votación, celebrada el viernes para coincidir con el Día Internacional de la Mujer y escrutada el sábado, como una oportunidad para eliminar un «lenguaje muy anticuado y sexista sobre las mujeres».
La propuesta de ampliar la definición de familia de una relación basada en el matrimonio a otras relaciones duraderas fue rechazada por un 67.7 por ciento frente a un 32.3 por ciento.
Un segundo referendo sobre la propuesta de sustituir el lenguaje relativo a los deberes de la mujer en el hogar por una cláusula que reconozca el papel de los miembros de la familia en la prestación de cuidados fue rechazado por el 73.9 por ciento frente al 26.1 por ciento.
Los activistas argumentaron que la propuesta consagraría los cuidados como una responsabilidad privada, y no estatal.
En declaraciones a la prensa el sábado en Dublín, Varadkar dijo que los votantes habían dado a su Gobierno «dos golpes».
«Era nuestra responsabilidad convencer a la mayoría de la gente de que votara sí, y claramente no lo hemos conseguido».