Al menos nueve personas murieron por los bombardeos llevados a cabo por el Ejército de Israel este jueves contra supuestos objetivos de los rebeldes yemeníes hutíes horas después de haber anunciado la intercepción de un misil lanzado desde Yemen por la insurgencia, que llevó a cabo decenas de ataques con drones y misiles durante los últimos meses contra territorio israelí.
Según las informaciones recogidas por la cadena de televisión yemení Al Masirah, vinculada a los rebeldes, al menos siete personas murieron en un bombardeo contra el puerto de Salid, mientras que otras dos murieron y una resultó herida en un ataque contra la instalación petrolera de Ras Isa. Asimismo, otras dos personas resultaron heridas en los ataques contra el puerto de Hodeida, bombardeos que han afectado además a la capital del país, Saná, donde fueron atacadas tres instalaciones energéticas.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron que aviones de combate atacaron “objetivos militares del régimen terrorista hutí en la franja costera occidental y en el interior de Yemen”, debido a que “ha llevado a cabo repetidos ataques contra el Estado de Israel” mediante drones y misiles, “la mayoría interceptados con éxito”.
Los bombardeos, llevados a cabo tras el visto bueno del ministro de Defensa israelí, Israel Katz, tienen el objetivo de “perjudicar al régimen terrorista al impedir la utilización de la infraestructura necesaria para acciones militares y terroristas, incluida la transferencia de armas iraníes a la región”.
Las FDI aseguraron en un comunicado que los hutíes “llevan operando durante el último año bajo la dirección y financiación de Irán y en cooperación con las milicias iraquíes con el fin de perjudicar a Israel, socavar el orden regional y perturbar la libertad de navegación mundial”.
El vicepresidente de la Autoridad de Medios de Comunicación de los hutíes, Naser al Din Amer, detalló a través de su perfil en la red social X que los ataques afectaron a la capital, Saná, y a la gobernación de Hodeida, en la costa oeste del país.
Por su parte, el portavoz militar de los rebeldes chiíes hutíes, Yahya Sarea, reivindicó el ataque lanzado este jueves contra Tel Aviv, y dijo que se trató de una operación que se llevó a cabo “de forma simultánea” con la acción israelí contra varias zonas del Yemen.
Los hutíes, respaldados por Teherán, “llevaron a cabo una operación militar específica dirigida contra dos objetivos militares específicos y sensibles del enemigo israelí en la zona ocupada de Yaffa (Tel Aviv) con dos misiles balísticos hipersónicos, tipo Palestina 2″, afirmó Sarea en un comunicado televisado, una acción que “alcanzó sus objetivos”.
“La operación se llevó a cabo simultáneamente con la agresión israelí contra instalaciones civiles en la capital, Saná, y en la provincia de Al Hodeida, incluidas centrales eléctricas, y nuestra respuesta entró dentro de lo natural y legítimo”, afirmó.
Esta misma semana, los hutíes lanzaron un dron y un misil balístico hipersónico “tipo Palestina 2” hacia un “objetivo militar del enemigo israelí” ubicado en Tel Aviv. Las autoridades israelíes aseguraron que habían frustrado el ataque, si bien la insurgencia yemení dijo que la operación había “logrado con éxito sus objetivos”.