La votación de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Ecuador comenzó este domingo para elegir a la persona que gobernará el país los próximos cuatro años (2025-2029), a lo que optan el actual presidente, el empresario Daniel Noboa, y la candidata del correísmo, la progresista Luisa González.
Una vez inaugurada la jornada por la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Diana Atamaint, los 4 mil 376 centros de votación repartidos en el territorio nacional empezaron a abrir desde las 7:00 h local y permanecerán abiertos diez horas hasta las 17:00 h local, momento en el que comenzará el escrutinio, cuyo resultado se prevé muy ajustado.
A las urnas están convocados más de 13.7 millones de ecuatorianos, de los que unos 450 mil lo hacen en el exterior, la mayoría concentrados en Estados Unidos, España e Italia, con un horario de votación que va desde las 9:00 hasta las 19:00 del huso horario de cada demarcación consular.
Es la segunda vez en apenas año y medio que Ecuador debe elegir para la Presidencia entre Noboa y González, después de que ambos candidatos fueran también los finalistas de las elecciones extraordinarias de 2023.
En los últimos comicios salió ganador Noboa con un 51.83 por ciento de los votos válidos frente al 48.17 por ciento de González, un resultado que para esta elección aún se proyecta que sea más estrecho sin pronóstico del lado para el que se decantará la balanza.
Polarización máxima
La polarización entre los dos candidatos es máxima como ya quedó plasmada en la primera vuelta, donde a pesar de tener una papeleta con dieciséis candidatos, Noboa y González acapararon el 88.16 por ciento de los votos válidos, con un 44.17 por ciento para el mandatario y un 44 por ciento para la correísta, separados por poco más de 16 mil votos.
Noboa, hijo del magnate del sector bananero y cinco veces candidato presidencial Álvaro Noboa, uno de los hombres más ricos del país, se convirtió en 2023, con 35 años, en el presidente más joven de Latinoamérica y de la historia democrática de Ecuador.
Ahora el candidato y líder de Acción Democrática Nacional (ADN) busca un mandato completo con el que seguir su “guerra” declarada al crimen organizado y profundizar sus reformas para liberalizar la economía, para lo que ha anunciado que impulsará una Asamblea Constituyente que deje atrás la actual Constitución (2008), aprobada durante el mandato presidencial de Correa (2007-2017).
Mientras, González, una abogada de origen campesino, de 47 años, aspira a ser la primera mujer de la historia de Ecuador en ganar unas elecciones presidenciales y devolver al correísmo al poder tras ocho años en la oposición.
La candidata de la Revolución Ciudadana (RC), el partido que tiene como líder a Correa, ha reunido en torno a ella a votantes descontentos con Noboa y ha prometido hacer un gobierno de “unidad” que abarque a diversas fuerzas políticas para hacer frente de forma conjunta a los distintos desafíos que enfrenta el país, especialmente en violencia y narcotráfico.
Voto obligatorio
En Ecuador, el voto es obligatorio entre los 18 y 64 años, mientras que es opcional para los adolescentes de 16 y 17 años, así como para los mayores de 65 años y para el personal de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas, que en su mayoría estará cumpliendo labores de vigilancia durante el transcurso de la jornada electoral.
Todo el proceso electoral transcurre bajo un escenario de violencia criminal que ha situado al país a la cabeza de Latinoamérica en índice de homicidios, una tendencia que incluso se ha recrudecido en este inicio de 2025 con un promedio de un asesinato por hora.
Por ello, volverán a ser cerca de 100 mil los miembros de las fuerzas de seguridad destinados a resguardar los recintos electorales y el transcurso de la jornada de votación, de ellos casi 60 mil policías y unos 40 mil militares.
Debido a la época de lluvias han tenido que ser reubicados dieciocho centros de votación que actualmente se encuentran inundados en diversas partes del país.
Como en la primera vuelta, habrá desplegados más de 940 observadores, de ellos unos 200 de las misiones de observación electoral de la Unión Europea (UE) y de la Organización de Estados Americanos (OEA), las dos mayores delegaciones.
Con información de EFE