Varios inversionistas de Estados Unidos y México mostraron interés de impulsar un auge de la industria de semiconductores en México, informó Luis Rosendo Gutiérrez, subsecretario de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía.
“Estuve en un foro de semiconductores en Ciudad Juárez y hay un gran apetito de inversionistas estadounidenses y mexicanos por hacer un boom de los chips en México”, dijo.
El foro se realizó el pasado miércoles con el objetivo de presentar un plan para la industria de semiconductores, que elaboraron juntas la Embajada de Estados Unidos en México y la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti).
Entrevistado por El Economista, Eugenio Marín, director ejecutivo de la Fundación México-Estados Unidos para la Ciencia (FUMEC), especificó que las áreas de oportunidad para invertir en México están en el Diseño, Ensamble, Empaque y Validación (ATP, por su sigla en inglés), en la proveeduría de insumos y componentes para estas producciones y en el abasto de los insumos que requieren las fábricas de obleas instaladas en Estados Unidos.
“Estamos actualmente diseñando con la Secretaría de Hacienda un programa de incentivos muy al estilo de lo que se hizo en Estados Unidos en la Inflation Act y en la CHIPS Act para apoyar a la industria de chips semiconductores en nuestro país y apoyar a estas industrias de elevada tecnología”, agregó Gutiérrez, al participar en el XXX Congreso del Comercio Exterior Mexicano, organizado por el Consejo Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce).
Como parte de los apoyos de la Ley CHIPS y Ciencia, promulgada en agosto del 2022, el Departamento de Comercio es responsable de administrar los 38,220 millones de dólares de fondos directos para incentivos a la fabricación de semiconductores, incluidos 500 millones para siete países fuera de Estados Unidos, entre ellos México.
Una parte de estos fondos (hasta 6,000 millones de dólares) se utilizará para subsidiar préstamos directos o garantías de préstamos por un total de hasta 75,000 millones.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos espera que el monto total de los incentivos otorgados para un proyecto (incluidas las subvenciones, los préstamos y las garantías de préstamos) represente menos de 35% de los gastos de capital totales.
En tanto que las subvenciones directas deben representar entre 5 y 15% de los costos totales del proyecto, los proyectos individuales no pueden recibir más de 3,000 millones de dólares en inversiones federales sin la certificación del Presidente ante el Congreso.
Además, la Sección 107 de la Ley CHIPS crea un nuevo crédito fiscal, el crédito por inversión en fabricación avanzada (AMIC, por su sigla en inglés), que será administrado por el Servicio de Impuestos Internos.
El AMIC es igual a 25% del valor de las inversiones calificadas en edificios y otros bienes tangibles depreciables y elegibles para instalaciones de fabricación avanzada que tengan como propósito principal la fabricación de semiconductores o equipos de fabricación de semiconductores.
Marín expuso que México requiere analizar cómo otorgar incentivos específicos al sector de semiconductores, considerando los formatos, la competencia con los países competidores directos y el tamaño de las inversiones.
“En estos nichos, las inversiones no son de miles de millones de dólares, son mucho menores, y eso es lo que hay que estudiar bien para encontrar el balance con respecto a las naciones con las que compite México”, dijo.
Por su parte, la Ley para la Reducción de la Inflación, también del 2022 destina unos 380,000 millones de dólares a incentivos fiscales y otros apoyos relacionados con la energía limpia y el cambio climático. Incluye estímulos a la producción de diodos, transistores y dispositivos semiconductores similares; dispositivos semiconductores fotosensibles; y diodos emisores de luz.
Urge equilibrar: Economía
En su Plan de Trabajo 2024-2030, presentado hace unos días, la Secretaría de Economía diagnosticó la urgencia de que México incremente los incentivos para atraer más inversiones en ramos como la manufactura avanzada.
“La Secretaría de Economía está trabajando el Portafolio de Inversión 2025 para crear un pipeline (proceso estructurado) de seguimiento y aterrizaje de las inversiones en nuestro país”, se establece en una presentación del Plan de Trabajo.
Para ello, agrega que se necesitará la coordinación con diversas secretarías. “Es urgente reducir la desventaja que representan la Ley para la Reducción de la Inflación por parte de Estados Unidos y el Paquete de Estímulos Implementados por Canadá”, insta.
México otorga a sectores exportadores clave una deducción inmediata por los bienes nuevos de activo fijo adquiridos a partir del 12 de octubre de 2023 y hasta el 31 de diciembre de 2024, con porcentajes de deducción que van de 56 a 89%, y una deducción adicional de 25% durante tres años, para gastos de capacitación laboral.
Incentivos otorgados por EU a la industria de chips
* La Ley CHIPS y Ciencia asignó más de 50,000 millones de dólares al programa CHIPS for America del Departamento de Comercio, tanto para I+D como para ampliar la capacidad de fabricación de semiconductores en Estados Unidos.
* Como parte de los apoyos de la Ley CHIPS y Ciencia, el Departamento de Comercio es responsable de administrar los 38,220 millones de dólares de fondos directos disponibles para incentivos a la fabricación de semiconductores.
* La Ley CHIPS de 2022 creó el Fondo ITSI, que proporciona al Departamento de Estado 500 millones de dólares (100 millones de dólares al año durante cinco años, a partir del año fiscal 2023).
* El Fondo ITSI busca garantizar la seguridad de los semiconductores y diversificación de la cadena de suministro a través de nuevos programas e iniciativas con siete países aliados y socios de Estados Unidos, entre ellos México.
* Una parte de los fondos de la Ley CHIPS (hasta 6,000 millones de dólares) se utilizará para subsidiar préstamos directos o garantías de préstamos por un total de hasta 75,000 millones.
* La Ley para la Reducción de la Inflación de 2022 destina unos 380,000 millones de dólares a incentivos fiscales y otros apoyos relacionados con la energía limpia y el cambio climático.