Un ataque armado, presuntamente perpetrado por integrantes del Cártel Santa Rosa de Lima, dejó un saldo de siete personas fallecidas, entre ellas una mujer, y seis más heridas, incluido un niño de 10 años.
Las víctimas descansaban después de haber construido una tumba en el panteón de la comunidad de Agua Azul, en el municipio de Apaseo el Grande, que aparentemente estaba destinada al padre de un generador de violencia vinculado al Cártel Jalisco Nueva Generación.
El ataque ocurrió alrededor de las 5:00 de la tarde, cuando el grupo de personas se encontraba conviviendo y bebiendo cerveza en el panteón.
Las autoridades municipales desplegaron un fuerte operativo y lograron asegurar una camioneta, en cuyo interior encontraron equipo táctico, estrellas ponchallantas y cargadores de rifle AK-47. El operativo continúa con el apoyo de fuerzas estatales y federales para ubicar y capturar a los responsables.
En la región Laja-Bajío, las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado han reforzado la presencia con más de 500 efectivos, principalmente para apoyar a las corporaciones municipales, que han sido debilitadas por los cambios de administración, como en el municipio de Celaya, ubicado a unos 25 minutos de Apaseo el Grande.
En Celaya, los homicidios han aumentado drásticamente desde que la Guardia Nacional asumió el control de la policía en agosto pasado, coincidiendo con el cambio de administración.
Entre agosto de 2023 y agosto de 2024, los homicidios aumentaron un 96%, pasando de 30 a 73 víctimas, y las cifras siguen siendo altas debido al despido masivo de policías municipales tras el cambio de gobierno. Solo en enero de 2024, Celaya registró 44 homicidios, un incremento del 46.67% respecto al mismo mes del año anterior, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Esa misma tarde, alrededor de las 3:45, el exdirector de la Policía Municipal de Celaya, reconocido por su enfrentamiento con el Cártel Santa Rosa de Lima y el Cártel Jalisco Nueva Generación, fue asesinado por sicarios en motocicleta, quienes huyeron rápidamente debido a la lenta reacción de la corporación municipal.
Mientras tanto, los municipios de Apaseo el Grande y Apaseo el Alto han logrado importantes detenciones de generadores de violencia, aunque no han podido escapar de la violencia criminal, a la cual enfrentan con el apoyo de las fuerzas estatales y federales.