La magistrada del Poder Judicial del Estado, Myriam Hernández Acosta manifestó que el llamado de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo para que no se realice una aprobación “fast-track” de la reforma judicial busca únicamente cuidar los tiempos y formas para evitar impugnaciones y no para escuchar las necesidades y planteamientos que se realizaron en los foros de consulta.
Explicó que la reforma judicial afecta en todos los aspectos, desde prestaciones, derechos adquiridos, hasta la manera en que se pretende “borrar de un plumazo” a todos los actores del Poder Judicial.
“Están hablando de dos etapas y para el 2027 tendría que renovarse todos los puestos, estamos hablando de una gran cantidad de compañeros que tiene una trayectoria. Se está borrando además la preparación, la capacitación, entonces, definitivamente no podemos ir con esta reforma y vamos a seguir alzando la voz hasta que se nos escuche”.
Hernández Acosta reiteró que de ninguna manera hay una oposición a que se realice una reestructuración del Poder Judicial, así como a un análisis y autocrítica, sin embargo, consideró que la manera en que se pretende llevar a cabo la reforma no es con las mejores formas.
Recordó que ayer por la noche se llevó a cabo una manifestación afuera del Congreso del Estado en reclamo a la reforma judicial que se considera como equivocada e injusta que afecta los intereses del Poder Judicial del Estado.
