Lucero y Manuel Mijares estuvieron casados de 1997 a 2011 y comparten dos hijos; José Manuel y Lucerito, y pese a su separación mantienen una gran relación.
Pese a estar divorciados desde hace más de 14 años, Lucero y Mijares han demostrado que mantienen una excelente relación por el bien de sus hijos y que, aunque ya no son pareja, son los mejores amigos, dando cátedra de madurez fuera y dentro de los escenarios.
La cantante, junto a su hija Lucerito, conmovieron al público del programa Juego de Voces, con un sentido homenaje que le realizaron al intérprete de Soldado del amor, en el que además recordaron a José María Mijares, su fallecido padre.
Lucero le dedica un amoroso mensaje a Mijares
En medio de ese tributo, Lucero le dedicó un amoroso mensaje a su ex esposo y papá de sus hijos.
«Deseo y decreto con todo mi corazón que Jos y Lucerito te sigan viendo y teniendo sano, pleno y feliz por muchos, muchísimos años más. Todos los que te queremos estamos muy orgullosos de ti, tus hijos te aman como probablemente tú no te lo imaginas y todos los días también me lo dicen. Gracias por este momento Manuel y gracias a Chema y a tu madre por traer al hijo maravilloso que ellos siempre soñaron a este mundo junto con tus hermanos», expresó la cantante.
Sentados uno junto al otro y con su hija Lucerito entre ambos, tomándose de las manos, Lucero le expresó lo afortunada que se siente de haberlo elegido como esposo.
Lucero le expresa su cariño a Mijares
«La verdad es que soy muy feliz de que después de que hayamos sido esposos, ahora seamos muy buenos amigos y con cariño y respeto cuidemos el uno del otro», aseguró la cantante.
Recordando a su fallecido ex suegro, la intérprete de Tácticas de Guerra habló de las cualidades que el señor José María Mijares le heredó a su hijo. «Así como él fue enorme en todos los aspectos, así lo has heredado tú», dijo.
Tras este conmovedor momento, Lucero y Mijares se acercaron y ella lo abrazó y le dio un dulce beso en la mejilla. Detrás de ellos se encontraba Lucerito, quien no pudo contener las lágrimas al contemplar la emotiva situación.
