Elon Musk se forjó su fama de trabajador incansable cuando se hizo público que sus jornadas en Tesla se estiraban más allá de las 120 horas semanales y que incluso dormía en su despacho de la gigafactoría de Austin durante la crisis de producción del Model 3.
Sin embargo, el millonario parece haber cambiado de opinión al ver la evolución de la IA y ha sorprendido al mundo con una visión futurista sobre el trabajo: «trabajar será opcional», aseguraba la persona más rica del mundo en una reciente intervención en un foro de inversores en Arabia Saudí.
Del 996 a «trabajar es opcional». Elon Musk, famoso por defender las jornadas de 80 horas para lograr grandes metas publicó en noviembre de 2018 un mensaje en su red social X que definía a la perfección su posicionamiento con respecto a la jornada laboral: «nadie ha cambiado el mundo trabajando 40 horas a la semana», escribía el millonario.

En una entrevista en el podcast ‘People by WTF’ de Nikil Kamath, Musk ha cambiado de opinión y ha pasado a opinar que, en un plazo de «entre 10 y 20 años, el trabajo será opcional. Como un hobby» gracias al incremento en la productividad que promete la evolución de la IA y la progresiva llegada de los robots humanoides como el Optimus que está desarrollando Tesla.
En su charla con Kamath, Musk comparó trabajar con cultivar verduras en un huerto propio: «Puedes cultivar tus propias verduras en tu jardín o puedes ir a la tienda a comprarlas. Es mucho más difícil cultivar tus propias verduras. Pero a algunas personas les gusta cultivar sus verduras, y eso está bien. Pero será opcional, de esa manera, es mi predicción», aseguraba el CEO de Tesla.
Su fórmula: renta universal. Musk cree que una renta universal cubrirá todos los gastos básicos de la población, eliminando la necesidad de un empleo obligatorio. Esto permitiría a la gente vivir en el campo o la ciudad sin depender de un puesto de trabajo cerca de una oficina. El empresario añadió: «No tendrás que estar en una ciudad para un trabajo. Si puedes pensarlo, puedes tenerlo, ese será el futuro».
Esta visión de una población financiada por una renta básica universal se alinea con los experimentos con la renta básica financiados por Sam Altman, exsocio fundador de OpenAI y actual rival de Musk.
El futuro de la IA se cohesiona. Con este cambio de opinión con respecto a la jornada de trabajo, Elon Musk se alinea con figuras como Bill Gates, que predicen que la IA automatizará casi todo y llevará a semanas laborales de solo tres días en menos de una década. Eric Yuan, CEO de Zoom, también apuntaba en una entrevista con The New York Times, a la teoría de la semana de tres días laborales gracias al aumento de productividad.
Jensen Huang, CEO de Nvidia, coincidía hace unos días con Musk en el escenario del Foro de inversores de Arabia Saudí. Allí se mostró de acuerdo con el postulado del CEO de Tesla. Huang lleva mucho tiempo sosteniendo que la IA impulsará la semana laboral de cuatro días, impulsando la generación de ideas y proyectos más allá de las capacidades actuales.
La IA es una preocupación para la Gen Z. Mientras las predicciones de los CEO tecnológicos se cumplen, la realidad es que la evolución de la IA se ha convertido en una seria preocupación para los jóvenes de la generación Z que están iniciando su carrera laboral.
Los primeros datos ya apuntan a que algunas grandes empresas están reduciendo las contrataciones en los puestos de entrada, que habitualmente ocupaban los recién graduados. Una reciente encuesta del Deutsche Bank Research Institute revelaba que la generación Z se mostraba «muy preocupada» por el hecho de que una IA le robe oportunidades laborales. A medida que la pregunta se traslada a las generaciones anteriores, esa preocupación se diluye.







