Hágase la austeridad, pero en los bueyes de mi compadre. No cabe duda que a la mayoría de los líderes morenistas se les llena la boca al hablar del “pueblo”, que utilizan un patriotismo que ni ellos se la creen, pero que a la primera oportunidad, es decir, apenas y llegan las vacaciones, se van de este “bello” país a disfrutar de las bondades del primer mundo, aprovechan vivir unos días sin violencia, sin el día a día de que lo que ellos mismos han “logrado” hacer con México en los últimos siete años, desde la llegada de su querida 4T. Ricardo Monreal, coordinador de los diputados federales de Morena, de paseo en España; el titular de la SEP y exdirigente nacional morenista, Mario Delegado, en Portugal, el diputado federal Enrique Vásquez en un exclusivo antro de Ibiza y la cereza del pastel, Andy López, el hijo de la leyenda, en Japón, un país que ni de cerca se asemeja al nuestro, ni en el comportamiento de sus ciudadanos y mucho menos en el de sus políticos y líderes, porque acá lo que hay es mucha mentira y mucha corrupción, precisamente para que unos pocos puedan gozar de vacaciones internacionales y la mayoría, “el pueblo”, no pueda salir ni a la esquina por el terror que se vive día a día o porque de plano ya ni para eso alcanza… aunque a algunos les llegue su pensión.
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Pero mientras unos vacacionan, el que anduvo este fin de semana en Chihuahua capital es el alcalde juarense Cruz Pérez Cuéllar, luego de su agarrón con su homólogo capitalino, Marco Bonilla, a quien culpó de todos sus males, sin asumir que ese golpeteo mediático bien pudiera ser puro fuego amigo, como si eso no se les diera tan, pero tan bien, al interior de Morena.
Y precisamente porque quien más se ha visto beneficiado por el escándalo que envuelve al Grupo Tabasco con el narcosecretario del senador Adán Augusto López, es el alcalde de Ciudad Juárez en su carrera por la candidatura de Morena a la gubernatura, es que Pérez Cuéllar se dio una vuelta a la ciudad de Chihuahua este fin de semana, en donde participó en un evento de afiliación de nuevos militantes al partido guinda, evento que se llevó a cabo en Jardines de Oriente y que le ayudaron a organizar el exdiputado local Miguel Colunga y el presidente del Consejo Estatal morenista, el regidor Hugo González, quien desde hace rato ya, trae su apuesta en la figura de Cruz, un expanista, para gobernador.
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Otro expanista convertido en moreno que también anduvo este fin de semana en Chihuahua capital es el senador Javier Corral, al cual no le fue nada bien en lo que a situación mediática se refiere, y es que durante la presentación de un libro de su compa Ricardo Raphael en la librería corralista ubicada en la avenida Independencia, un grupo de personas se manifestó en contra del exgobernador que hoy es senador por Morena.
Resulta que a Corral le recordaron su época de inquisidor del duartismo cuando estuvo como señor absoluto de Palacio de Gobierno, al acusarlo de utilizar a la Fiscalía General del Estado y al Poder Judicial para encarcelar a figuras vinculadas al exgobernador César Duarte, además de que de pasada arremetieron contra su invitado, al señalarlo de presunto plagio en el libro que estaba presentando. Por obvias razones, Corral le puso nombre y apellido a la mente detrás de la manifestación en su contra, y aunque tenga razón, también se ha dado cuenta de que cuando pise la ciudad de Chihuahua, esto podría ser una constante, una muestra de “cariño” con sello muy ballezano.
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A pesar de que el martes pasado la gobernadora Maru Campos acudió a Guadalupe y Calvo para encabezar la Mesa de Seguridad, en donde tanto ella como autoridades federales le tendieron la mano a la alcaldesa de ese municipio, Ana Laura González, ante la narcoviolencia que se vive, la molestia y el descontento de los habitantes continúa hacia la Presidenta Municipal de extracción morenista, a la cual volvieron a señalar de esconderse y de hacerse de la vista gorda ante las balaceras que ocurren a diario en ese municipio enclavado en el Triángulo Dorado, con todo y que se le presentó una estrategia de coordinación para combatir la inseguridad, por lo que a ver si no vuelve a ser llamada a un nuevo jalón de orejas para que por favor se ponga a trabajar.