Una de las mascotas más conocidas por sus largas horas de sueño son los gatos. Si alguna vez te has preguntado por qué estos pequeños felinos pasan tanto tiempo durmiendo, la respuesta se encuentra en su naturaleza de depredadores.
Cabe destacar que estos felinos pueden dormir entre 12 y 16 horas diarias, no sólo por placer, sino como parte de una estrategia evolutiva.
Según con National Geographic, los gatos gastan una gran cantidad de energía cuando cazan, una actividad que requiere precisión y agilidad. Aunque los gatos domésticos no necesitan cazar para alimentarse, su instinto sigue presente, lo que los lleva a dormir extensamente para conservar energía.
Este patrón de sueño se divide en dos tipos: el sueño de ondas lentas (SWS), donde descansan, pero permanecen alerta, y el sueño REM, donde duermen profundamente.
Los gatos son animales crepusculares, lo que significa que son más activos durante el amanecer y el atardecer. Este comportamiento está ligado a sus ancestros salvajes, que aprovechaban estas horas para cazar cuando sus presas también estaban activas.
Información tomada de El Informador
