Un convoy de tres naves con 400 toneladas de alimentos y otras provisiones para los famélicos palestinos en Gaza partió de un puerto en Chipre ayer, al aumentar las preocupaciones respecto del hambre en el territorio. La organización filantrópica estadunidense World Central Kitchen (WCK) indicó que los barcos y una barcaza llevan artículos listos para comer, entre ellos arroz, pasta, harina, legumbres, vegetales enlatados y proteínas con las que se pueden preparar más de un millón de comidas. A bordo también van dátiles, alimento tradicional para romper el ayuno durante al mes sagrado de Ramadán.
Es el segundo embarque este mes, después de que Israel aligeró un bloqueo naval de 17 años en la franja para permitir que la ayuda ingrese al territorio desde Chipre. Para ello, las autoridades chipriotas establecieron, en cooperación con Tel Aviv, un corredor marítimo para facilitar la entrega directa a Gaza de carga revisada antes de zarpar.
Un barco operado por la organización filantrópica española Open Arms abrió la ruta directa por mar hacia el territorio palestino a principios de este mes, con 200 toneladas de ayuda, agua y otros suministros. Se improvisó un muelle plástico para descargar el envío, puesto que el territorio no cuenta con instalaciones portuarias.
El convoy en ruta incluye dos montacargas y una grúa para ayudar los futuros desembarcos, así como un equipo de operadores.
Por separado, Estados Unidos planea construir un muelle flotante en la costa de Gaza para entregar los artículos. La fecha planeada para completarlo es el 1º de mayo, pero podría estar listo en abril, señaló el presidente chipriota, Nikos Christodoulides, citando reuniones de información con funcionarios estadunidenses esta semana.
La ayuda será llevada a Gaza en un barco carguero y una barcaza remolcada por una nave de salvamento, junto con un barco remolcador que lleva un equipo de apoyo. La travesía es de unas 60 horas.
WCK, activa en Gaza durante meses, arregló la misión con Open Arms, mediante el financiamiento base de Emiratos Árabes Unidos y apoyo de las autoridades chipriotas.
Deja EU caer desde el aire media tonelada de asistencia
Durante una entrega de ayuda desde el aire, antier, militares estadunidenses señalaron haber dejado caer unas 100 mil libras (45 mil kilos) de ayuda ese día y casi un millón (450 mil kilos) en total, como parte de un esfuerzo multinacional, pero funcionarios humanitarios señalan que las entregas por mar y por aire no son suficientes y que Israel debe permitir el paso de una cantidad mucho mayor de ayuda por tierra.
El más alto tribunal de Naciones Unidas ha ordenado a Israel abrir más puntos de cruce por tierra y tomar otras medidas.
Unas 300 mil personas han quedado atrapadas por los combates en el norte de la franja de Gaza, donde Naciones Unidas ha advertido que la hambruna es inminente.
Más de la mitad de los 2.3 millones de habitantes de la franja podrían enfrentar hambruna hacia julio, de acuerdo con la ONU. Más de 80 por ciento han sido desplazados de sus casas.
Representantes de la ONU han acusado a Israel de bloquear las misiones humanitarias dirigidas a Gaza, pero funcionarios de esa nación se deslindan y afirman que la entrega de ayuda en el territorio es responsabilidad de Naciones Unidas y las agencias humanitarias.
Los ataques aéreos y la ofensiva terrestres israelíes han dejado 32 mil 705 palestinos muertos, informaron ayer autoridades de salud de la franja, gobernada por Hamas; en las 24 horas pasadas, 82 cuerpos han sido llevados a los hospitales.
En tanto, tres observadores de Naciones Unidas y un intérprete resultaron heridos ayer, cuando un proyectil estalló cerca de ellos mientras realizaban un patrullaje a pie en el sur de Líbano, informó la misión de paz de la ONU, y añadió que aún investiga el origen de la explosión.
La misión de paz, conocida como Unifil (Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano), junto con observadores técnicos desarmados de la Untso (Organización de Naciones Unidas para Supervisión de Treguas), se encuentra estacionada en el sur de Líbano para documentar las hostilidades en la frontera ente Líbano e Israel, conocida como la línea azul.
El grupo armado libanés Hezbollah ha estado intercambiando fuego con militares israelíes a través de la línea azul desde octubre, en paralelo con la guerra en Gaza.
En un comunicado, la Unifil declaró ayer que atacar a pacificadores es inaceptable y que el personal herido ha sido evacuado para recibir tratamiento.
Horas antes, dos fuentes de seguridad declararon a reporteros que los observadores fueron heridos en un ataque israelí en las afueras de la población fronteriza de Rmeish.
Traducción: Jorge Anaya