Los medios de comunicación del mundo hacen eco de la inesperada reunión de este miércoles de la familia real española para celebrar el cumpleaños 60 de la infanta Elena. La nota fue la presencia de Letizia en medio de los rumores de infidelidad al rey Felipe VI.
La cita fue en el restaurante Pabú, en el distrito de Charmantín, en Madrid, y las primeras en llegar fueron la festejada acompañada de su mamá, la reina Sofía, y su hermana, la infanta Cristina.
Más tarde entraron al local Irene, Juan y Pablo Urdangarin, Victoria Federica y Froilán, el rey emérito Juan Carlos I, Irene, María Zurita y Alexia de Grecia. Sin embargo, hubo una invitada que nadie esperaba: la reina Letizia.
Sin confirmación previa, llegaron sonrientes al lugar el rey Felipe VI y su esposa, quien se sabe tiene una «mala relación» con sus cuñadas por la supuesta negativa de las infantas a «rendirle cuentas» en cuestión de dinero en su papel de reina consorte.
Letizia llega al festejo de cumpleaños 60 de la infanta Elena
La presencia de Letizia acaparó la atención de la prensa mundial porque se da a dos semanas de que el ex esposo de su hermana Telma Ortiz, Jaime del Burgo, publicara que había tenido un romance con la reina cuando ella ya estaba casada con Felipe VI.
“La verdad saldrá, probada, documentada. A mí me toca contarla y al que se sienta injuriado que acuda a los tribunales, que para eso están. Los españoles tienen derecho a conocer quiénes nos representan por herencia o elección,qué hay detrás de los focos, la escenificación y la actuación”, publicó Jaime tras revelar la presunta infidelidad.
La llegada de Letizia al festejo de la infanta Elena ha sido interpretada por expertos en realeza como la señal de «sumisión» ante la familia real española con el fin de protegerse y proteger a su hija, Leonor de España, heredera del trono.
«En estos momentos la reina Letizia está haciendo penitencia. Está comiendo con su familia política con quien tan mala relación tiene. Esta familia política que la detesta y que le ha hecho la vida imposible estos últimos años», aseguró al respecto la periodista española Pilar Eyre a Lecturas.
«Yo creo que ha tenido que agachar la cabeza. Lo que no ha conseguido nadie, lo ha conseguido del Burgo. Con esos tweets ha conseguido que Letizia se convierta en una persona sumisa, que pida disculpas de esta manera, que quiera estar al lado de su familia y que la proteja la familia real, algo que hasta ahora no había necesitado porque estaba en una posición de fuerza y ahora no lo está», añadió la experta en realeza.
Hasta el momento, tanto Letizia como el rey Felipe han guardado silencio sobre la presunta infidelidad que se habría dado en los inicios de su matrimonio.
Según Burgo, Letizia y él se conocieron en el año 2000, mantuvieron una relación amorosa de 2002 a 2004 y de 2004 a 2010 fueron “amigos y confidentes”. De 2012 a 2016 fueron cuñados.