“Voy por Chihuahua”. Con esa frase, el alcalde Marco Bonilla ya no dejó lugar a la duda de que buscará sí o sí labrarse un camino a la gubernatura de Chihuahua, y más que nada porque minutos después, recibió el espaldarazo por parte de la gobernadora Maru Campos, quien también fue clara y concisa con frases como “te invito a seguir”, “el futuro de Chihuahua no se negocia y no se entrega”, además de con eso de “juntos daremos norte al país”, tanto Maru como Marco disiparon cualquier rumor y mostraron esa alianza tan necesaria entre los dos panistas chihuahuenses más visibles y con más potencial para continuar siendo la oposición que no solamente Chihuahua necesita, también México, y que mejor que delante del dirigente nacional del PAN, Jorge Romero, el cual no se separó prácticamente ni un momento de ambos líderes azules que representan el futuro del panismo y de la oposición para enfrentar a una ola morena que en este estado norteño sigue topándose con pared. Así que en resumidas cuentas: Marco se destapó, va por la gubernatura, y desde Palacio recibió el visto bueno ante un escenario repleto de liderazgos políticos, empresariales y sociales que los apoyan.

Y aunque hubo quien le quiso arruinar su día al alcalde Marco Bonilla, como el hecho de enviarle manifestaciones al Centro de la ciudad o a las instalaciones del PAN Estatal, los malosos nos dicen que los remitentes de esas “protestas ciudadanas” tienen nombre y apellido, algunas vez fueron tricolores, azules y hasta verdes, pero ahora lo guinda de su corazón los hace fraguar estrategias que caen en lo burdo y que reflejan esa manipulación que nunca se irá mientras existan ciudadanos que estén dispuestos a caer en el juego de la grilla trasnochada. Poco o nada sirvió la estrategia, pero al menos sí debería alertar al panismo local que desde la acera de enfrente están dispuestos a utilizar todas las prácticas necesarias para denostar al Presidente Municipal de Chihuahua capital.

******

Es así que en un tiempo donde la política parece reducirse a ataques y descalificaciones, llama la atención cuando un gobernante elige el camino de la unidad, justo como lo hizo el alcalde Marco Bonilla en su Informe al reconocer a quienes gobernaron antes que él como son los exalcaldes Gustavo Ramos, Patricio Martínez, Reyes Baeza, Alejandro Cano, Juan Blanco, Álvaro Madero, Manque Granados, Javier Garfio y con especial afecto, a Maru Campos, a quien llamó como su gran amiga. Bonilla no trató de borrar el pasado, al contrario, afirmó con claridad que la ciudad no empezó con él y que su labor ha sido continuar y mejorar lo construido. Esa humildad no es debilidad, es fortaleza, porque quien no necesita descalificar al anterior, demuestra seguridad en su propio trabajo.

Pero en esa lista de nombres hubo uno que no fue mencionado y no fue casualidad, sino el resultado de sus propios actos, porque mientras los exalcaldes reconocidos han mantenido un perfil institucional, algunos incluso en silencio, otros con apoyos discretos, este personaje, hoy en Morena, ha elegido la ruta del golpeteo político constante, sin propuestas, sin autocrítica y sin aportes concretos al debate público.

******

Para no dejar algo en el tintero de la visita del dirigente nacional del PAN, Jorge Romero, a esta ciudad, en donde no solamente les reiteró todo su apoyo al alcalde Marco Bonilla y a la gobernadora Maru Campos, también dio de qué hablar el hecho de que insistió que la jefa del Ejecutivo chihuahuense “es una carta fuertísima para el 2030”, además de un augurio que bien pudiera ponerle voz de profeta, pues Romero Herrera adelantó que con todo y su soberbia, es muy probable que los morenistas se maten entre ellos por la candidatura guinda a la gubernatura de Chihuahua, vaya, no hay que tener una bola de cristal para suponer que así será, pero el hecho de que desde todos los flancos eso se note, pone al morenismo es una situación en donde quizá una operación cicatriz no les alcance ante la posible hemorragia que será el elegir candidata o candidato, sobre todo con el choque de trenes que será decidirse entre la senadora Andrea Chávez y el alcalde juarense Cruz Pérez Cuéllar, que es donde seguramente la sangre llegará al río.

******

Ya que mencionamos a la senadora Andrea Chávez y al alcalde de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, será este domingo cuando a los dos les toque presumir el músculo político, pues ambos tienen agendados sus respectivos Informes. La legisladora a las 10 de la mañana en el Centro de Convenciones de Chihuahua capital y el alcalde juarense a las 19 horas en el Estadio 8 de Diciembre allá en la fronteriza ciudad. No, no se empalmarán los horarios, pero definitivamente los líderes morenos de talla nacional que se presenten al de Andrea se trasladen por la tarde a la frontera, o de plano permitirán que se note la división de grupos y cada a quien a lo suyo. Eso, estimados lectores, será la cuestión. Pero la cuestión que en estos momentos más genera expectativa es si al Informe de la senadora vendrá su coordinador en la Cámara Alta y padrino político, Adán Augusto López, cuyo escándalo con su entonces narcosecretario de Seguridad allá en Tabasco barrió con la popularidad que en su momento traía Andrea Chávez, por lo que será interesante ver si López Hernández se presenta este domingo en la capital chihuahuense o si opta por mantenerse alejado del reflector y que de esta forma el escándalo político no le siga salpicando a su protegida.

******

Los que a mitad de semana se reunieron con los integrantes de la CANACO que aquí en Chihuahua encabeza Alejandro Lazzarotto, son los diputados federales Manque Granados y Alex Domínguez, así como el senador Mario Vázquez, los cuales fueron citados por los agremiados a la Cámara de Comercio para platicar de las necesidades que enfrenta el sector productivo, sobre todo porque acaba de iniciar el periodo ordinario en ambas Cámaras y si algo ha caracterizado a los tres legisladores antes mencionados, es que son de los pocos que escuchan al gremio y llevan sus inquietudes como parte de la agenda legislativa.

error: Entrelineas Noticias Chihuahua