Tras estrenar “Ojalá”, canción que grabó junto a Beret, Dulce María habla del poder curativo de la música y de la necesidad de cuidar nuestra salud mental.
Para Dulce María (como para el resto del mundo) el recuerdo de la pandemia y el aislamiento que trajo consigo se ha convertido en un punto de inflexión en su historia. Ahora, a más de cuatro años de aquel momento, convertida en mamá y tras el reencuentro de RBD, su presencia en la música se ha fortalecido y está más vigente que nunca.
Hace unos días refrendó su contrato como compositora con Sony Music, compañía con la que ha trabajado durante 12 años, y después de estrenar la canción “Ojalá”, que grabó a dueto con su autor e intérprete original, Beret, la cantante de 38 años hace una pausa para volver sobre sus pasos y hacer un balance de las experiencias vividas, las lecciones aprendidas y de cómo, a pesar de la velocidad con que ha pasado todo, la música le demostró su poder curativo.
“A mí, la música sí me ayuda y sí me salva”, reconoce en entrevista exclusiva para Quién y, como pocas veces, nos permite acompañarla en un viaje de introspección y reconocer en sus palabras un proceso que nos suena familiar, ya que se parece al que millones de personas vivimos en estos últimos tiempos.
Dulce María vivió un vorágine de acontecimientos tras ser mamá
“Yo pensé que cuando fuera mamá, iba a parar y me iba a desaparecer un rato”, confiesa Dulce María sobre la llegada de su hija, María Paula, quien nació en diciembre de 2020 –en plena pandemia–. “La verdad es que no fue así. Más bien, hice un montón de cosas”, recuerda.
Además de participar en la telenovela Pienso en ti, en la que actuó y contribuyó con música, también formó parte de la gira de los 2000’s Pop Tour y, luego, llegó el tan ansiado reencuentro de RBD.
“En cuanto terminé de hacer la novela, luego, luego me metí a los ensayos para preparar la gira y luego terminó la gira y bueno. Me dediqué muchísimo pero, aparte de que ser mamá es un trabajo de tiempo completo, también he estado enfocada y tratando de ser la mejor versión de mí para mi bebé y para mi familia”, cuenta.
Dulce María habla de lo difícil que fue el tour con RBD
Después de estos años en los que, a sus compromisos profesionales, sumó sus responsabilidades como mamá, Dulce María se ha dedicado a encontrar equilibrio y armonía, a hacer introspección y conectar con su lado espiritual; en pocas palabras, a volver a su centro después de la explosión de emociones que significó reencontrarse con los fans de Rebelde y reconectar con sus compañeros en los escenarios.
“Porque, de pronto, fue tan intenso todo, el volver a vivir tanta euforia, tantas emociones, tantos cambios; después de 15 años son muchas cosas”, y es que la cantante ya había tenido su etapa como solista, pero nada se compara con las exigencias de un tour con RBD.
“Recordar esa etapa, volver al pelo rojo y a un lugar que es algo muy grande en mi vida, pero al mismo tiempo con muchos retos. Creo que 54 shows en cuatro meses no está bien, es demasiado; debe haber una contención. No puedes dar y dar y dar y que no haya una contención para el artista, para el ser humano que está haciendo esa gira”, reconoce.
Por esta razón y tras el fin de la gira, este año se lo ha dedicado a su esposo, Francisco Álvarez, y su hija María Paula, y al resto de su familia. “A mi bebé, a mi esposo, a mi familia, a mi casa, a mis papás, a mis hermanas, a mis sobrinas”, explica, pero también a estar en contacto con sus emociones porque evidentemente su carrera sigue y busca que en cada nueva expresión suya viva su verdad. Por eso, insiste, se ha dedicado “a crear, a seguir componiendo, a leer, a nutrirme, para poder tener, para poder volver a mi centro, conectarme conmigo y poder dar algo más a la gente”.
Dulce María confiesa: “A mí, la música sí me salva”
Como un primer y decisivo paso, después de toda la vorágine de acontecimientos que vivió, Dulce María sumó su voz y grabó una nueva versión de la canción “Ojalá”, junto al español Beret, un tema al que ella abraza como un himno muy personal de reflexión e introspección que le llegó en el momento indicado. “Ahorita que ya me siento más fuerte y que ya me siento un poquito más tranquila, me parece importante levantar la voz”, dice.
“Es importante para mí levantar la voz por los temas que a mí me han ayudado. Por ejemplo, a mí, la música sí me ayuda y sí me salva y sí me acompaña en procesos y sí me ayuda a gestionar mis emociones y a sobrellevar la vida, porque es como un amigo invisible”, reflexiona.
De esta forma, asegura, la música –más allá de hacer conciertos o no– es un medio para conectar. “De hecho fue parte de lo que me salvó en la pandemia. Ahí saqué mi disco, Origen, y pues obviamente no iba a haber ningún concierto, pero saqué música y de esa manera sentía, dentro de todo el aislamiento que teníamos, que la música, las emociones y el amor y todo lo que lo que viene encerrado en el arte nos unía”, afirma.
“Fue algo que me ayudó y me dio esperanza, y por eso creo que ahorita con la música se trata de regresar y de dar esperanza. Es un abrazo al corazón para mí y para la gente que pueda escuchar esta canción y a quien pueda acompañarla en su proceso”, añade.
‘Ojalá’: El poder sanador de la música
“Los cantantes o las canciones te acompañan en procesos, aunque ni siquiera conozcas a las personas. Por eso, para mí, es importante la música y por eso decidí ahorita sacar esta canción”, explica Dulce María. Y es que, después de cantar “Ojalá” junto a Beret en 2022, durante un concierto que él ofreció en México, se dio cuenta que tenía muchísimo sentido por su contenido y por las circunstancias en las que la conoció originalmente, después de pasar mucho tiempo sola y embarazada durante la pandemia, ya que su esposo nunca dejó de salir de casa para trabajar.
“A mí me llega de otras formas y la aplico mucho a la salud mental, al amor, al amor propio y a la aceptación de uno mismo; de no exigirnos tanto, de hacer las paces contigo, de no dejar que el mundo te defina, sino tú mismo ser más paciente y dejar de exigirte tanto y ser amable contigo y también de alejarte de la gente que te hace daño”, señala la cantante.
“Yo lo he vivido desde muy chiquita que empecé a trabajar y creo que lo vivimos todos –no solamente en este medio, en cualquier medio– que puedes estar con mucha gente, pero hay muy pocos en quien confiar, muy pocos que te amen por lo que eres, que te acepten, que estén contigo en las buenas y en las malas”, asegura.
Felizmente, «Ojalá» también representa un proyecto en el que pudo participar toda la familia de Dulce María, ya que el video musical lo dirigió su esposo, Paco Álvarez, y su hija, María Paula, participa en la historia junto a la cantante.
Asimismo, insiste en que ella se enfoca en el tema de la salud mental con esta canción. “Por ejemplo, esta frase que dice que ‘Voy a mirar a la soga pa’ decir le sigo’ es algo muy fuerte, porque hay momentos donde puedes llegar a perder el sentido (de la vida), ya sea por una depresión, que estés viviendo un momento muy difícil, una pérdida, un duelo o, a veces, la depresión es simplemente que tienes un tema de falta de químicos y no importa que tengas lo mejor en la vida y estés en la mejor posición del mundo y tengas todo aparentemente; si tu cerebro no produce los químicos que necesitas, también puedes estar muy mal», explica.
«Desgraciadamente, yo he tenido amigos, conocidos, que han perdido la batalla contra la depresión y la ansiedad, y entonces por eso me parece importante hablarlo; porque si no lo vives, es muy difícil (de entender)”, puntaliza.
Los próximos pasos de Dulce María en la música
Después de una etapa de muchas pruebas y de vivir esta aceptación, ese “hacer las paces con uno mismo” y de reconocer el trayecto que ha recorrido tanto con RBD como en plan solista y como esposa y mamá, Dulce María sabe que su camino está lleno de retos y nuevas experiencias que seguirán enriqueciéndola y, sobre todo, que siempre contará con la música para acompañar sus pasos y, por ello, ha hecho un compromiso consigo misma para seguir en la dirección correcta, pero sin meter el acelerador.
“Creo que mientras haga las cosas con verdad y con congruencia, las cosas valdrán la pena y pueden conectar con la gente. En este momento, sí tengo varias composiciones, pero resulta que no tengo prisa” adelanta la cantante. “También estoy teniendo sesiones de composición, estoy haciendo varias cosas, pero poco a poco, porque también soy mamá de tiempo completo. Mi vida también es la vida de mi bebé”, señala.
“Quiero que cada cosa, que cada canción que salga, tenga algo que decir, tenga una historia, tenga un peso. Que le pueda tocar el corazón a la gente y sigo en proceso creativo”, concluye.